6 características fundamentales para ser un buen líder de Alianza

por jax17 Mar Ago 25, 2015 2:16 am

Dentro de una Alianza , la capacidad de un buen líder, o varios según los casos, resulta trascendental. Como el capitán de un barco, es su deber controlar el destino y el timón, pero así también conocer y mejorar todas y cada una de las circunstancias que puedan perjudicar al grupo.

Un líder es más que aquel que dicta las normas, es quien tiene la fuerza y el carisma necesarios para arrastrar consigo a los miembros de la Alianza.

Existen 6 características fundamentales, tales son:

Responsabilidad: el líder no sólo tiene derechos, sino más aún responsabilidades. Su responsabilidad es llevar a buen término al grupo en sí, tomar decisiones y contemplar todas y cada una de las circunstancias en las que se encuentra la Alianza. Debe estar presente en los foros, no sólo indicando directivas.
Empatía: se desprende de la característica anterior. Es fundamental que el líder tenga empatía con los miembros de la Alianza. Su presencia en el foro, por ejemplo, no sólo sirve para dar instrucciones, sino para crear lazos con el resto de los miembros. Un líder estimado resulta mucho más eficiente. Como decía Maquiavelo, es mejor ser amado que temido, claro que si no eres amado, mejor ser temido, pero cuidado con esto, ya que si los miembros de la Alianza se sienten demasiado sometidos a la arbitraria voluntad del líder con decisiones que puedan afectarles negativamente, puede que la abandonen o simplemente no brinden el apoyo que debieran. Por ello, participar de buen humor con el resto de los miembros resulta primordial si deseamos un efectivo seguimiento. Estar todo el tiempo a cara de perro no beneficia a nadie, y menos en un juego donde la gente está porque le apetece.
Valor: el líder debería ser el primero en colaborar. Algunas veces se critica la falta de colaboración de los miembros de una Alianza para la defensa del resto de compañeros, en ocasiones con razón. Sin embargo, el líder debe ser el primero en apoyar al resto de los miembros. Dicen que el ejemplo es lo más importante.
Instrucción: como resulta lógico y normal, algunos miembros de la Alianza seguramente han comenzado hace poco en el juego, muchas veces desconocen principios básicos para subir de nivel o crecer y así también poder ayudar a sus compañeros. Es deber del líder instruirlos, o procurar la manera de que aquellos otros miembros más experimentados se ocupen de resolver las dudas de quienes recién se inician. De otra manera, los miembros más débiles nunca crecerán y no serán capaces de aportar nada a la Alianza. Además de la instrucción se deberá animar a los miembros. Una buena arenga siempre es necesaria.
Sentido común: cosa difícil de encontrar, en general, en cualquier ámbito, pero no imposible. Una cosa es el valor y otra ser inconsciente de nuestros actos. Cuando declaramos una guerra debemos pensar en la capacidad que tenemos, si estamos en condiciones de llevarla a cabo o no. Una cosa es defenderse y atacar con criterio y otra embarcarse en una serie de rencillas personales. Cuando se antepone lo personal a lo grupal siempre se está destinado al fracaso. Perderemos a los más débiles, lo fuertes retrocederán en recursos y sólo conseguiremos hundirnos en la miseria.
Honor: la palabra dada, responder ante los compañeros, tener una idea en común e intentar llevarla a cabo, entre tantas otras cosas que puede significar esta palabra en este contexto. No traiciones a tu gente, nadie se encuentra lo suficientemente a salvo como para que aquello que decida hoy no le caiga encima mañana.
Un líder es más que aquel que dicta las normas, es quien tiene la fuerza y el carisma necesarios para arrastrar consigo a los miembros de la Alianza. Ofrécele a los tuyos tu mano firme, no tu caprichosa ambición.